¿Qué es un HIFU?

La HIFU es un procedimiento médico que utiliza ondas ultrasónicas para tratar determinadas afecciones, como tumores, fibromas uterinos y temblores. HIFU son las siglas en inglés de ultrasonido focalizado de alta intensidad, lo que significa que las ondas ultrasónicas se concentran en una zona específica, donde generan calor y destruyen el tejido anormal. La HIFU puede utilizarse como alternativa a la cirugía o la radioterapia, ya que es menos invasiva y tiene menos efectos secundarios.

Acerca del procedimiento HIFU

El procedimiento HIFU suele realizarse en un hospital o una clínica por un médico o técnico cualificado. El procedimiento puede durar desde unos minutos hasta unas horas, dependiendo del tipo y el tamaño de la zona tratada. El procedimiento puede requerir anestesia general o local, sedación o analgésicos, según el estado del paciente y sus preferencias. El procedimiento consiste en utilizar un dispositivo que emite ondas ultrasónicas a través de la piel o de una sonda introducida en el cuerpo. El dispositivo se guía por técnicas de imagen, como la ecografía o la resonancia magnética, para localizar la zona objetivo y controlar el tratamiento. Las ondas ultrasónicas crean una pequeña zona de alta temperatura, que destruye el tejido sin dañar los órganos circundantes.

¿Es usted el candidato adecuado para una HIFU?

Puede ser un buen candidato para la carboxiterapia si padece alguna afección o problema que pueda beneficiarse de los efectos curativos y regenerativos de las plaquetas y los factores de crecimiento, como lesiones crónicas de tendones, artrosis, caída del cabello o envejecimiento de la piel. También debe gozar de buena salud, tener expectativas realistas y comprender los riesgos y beneficios del procedimiento. Sin embargo, la carboxiterapia puede no ser adecuada para todo el mundo. No debe someterse a carboxiterapia si padece alguna de las siguientes afecciones o situaciones:

• Una infección activa, inflamación o fiebre.
• Un trastorno hemorrágico o antecedentes de coágulos sanguíneos.
• Una afección cardiaca o un marcapasos.
• Un tumor maligno o cáncer.
• Un trastorno tiroideo o un desequilibrio hormonal.
• Un embarazo o una lactancia.
• Una alergia a cualquiera de los ingredientes de los productos de carboxiterapia.
• Debe consultar con su médico antes de someterse a la carboxiterapia para determinar si es segura y eficaz para usted.

Preguntas frecuentes