Recuperación de la blefaroplastia
El tiempo de recuperación tras una blefaroplastia varía en función del tipo y el alcance de la intervención,
así como del proceso de cicatrización individual. Por lo general, la mayoría de las personas se toman unas 2
semanas de baja laboral para recuperarse de la cirugía de párpados1, pero algunas pueden necesitar más o
menos tiempo en función de sus trabajos y actividades.
No podrá conducir durante varios días después de la operación y necesitará que alguien le ayude con las
tareas cotidianas durante los primeros días. También deberá evitar actividades extenuantes, como hacer
ejercicio, levantar peso o agacharse, durante al menos 4 semanas después de la intervención.
Después de la intervención tendrá algunos hematomas e hinchazón alrededor de los ojos, lo que puede hacer
que vea borroso. Esto es normal y desaparecerá en 2 ó 3 semanas. Puede utilizar bolsas de hielo, gotas
oftálmicas y pomadas recetadas para reducir la hinchazón y las molestias. También debe mantener la cabeza
elevada y evitar frotarse o tocarse los ojos.
Tendrá algunas cicatrices en los párpados después de la intervención, que pueden ser visibles y sentirse
tirantes durante unos meses. Sin embargo, las cicatrices desaparecerán con el tiempo y serán menos visibles.
El cirujano realizará las incisiones en los pliegues naturales de los párpados o en el interior de los
mismos, por lo que las cicatrices quedarán ocultas en la medida de lo posible.
Verá los resultados de su cirugía de lifting de párpados gradualmente a medida que disminuyan la inflamación
y los hematomas. Los resultados definitivos aparecerán a los 4 meses de la intervención4. Notará que sus
ojos parecen más abiertos, despiertos y juveniles y que su visión mejora si antes tenía los párpados caídos.
Los resultados de la cirugía de párpados son duraderos, pero no permanentes. El envejecimiento, la
exposición al sol y los factores relacionados con el estilo de vida pueden afectar al aspecto de sus
párpados con el paso del tiempo.